Chaac es un importante Dios de la lluvia Maya. Es la representación de la lluvia y el agua, aunque también se le relacionaba con la producción de la agricultura, el relámpago y el trueno. La actividad de la agricultura fue muy importante en la vida cotidiana de los antiguos mayas, es por ellos que Chaac era sumamente importante para ellos.
Los mayas hacían ritos al dios Chaac para complacerlo y pedirle lluvia para proveer una buena cosecha al pueblo.
El Dios Chaac en las Ruinas Mayas
El Dios de la lluvia Maya Chaac está representado de una forma u otra en todas las ruinas mayas. Dependiente del sitio arqueológico, se puede observar a Chaac adornando las fachadas de los templos y pirámides. De igual manera, se puede ver en máscaras y otros artefactos decorativos.
En el sitio arqueológico de Uxmal, Yucatán, dan homenaje al Dios Maya Chaac sobre todos los demás dioses.
La leyenda del Dios de la lluvia Maya
Cuenta la leyenda que el dios Chaac era hermano con el Sol. Estaban juntos y así derrotaron a sus padres adoptivos. Con el tiempo, el Sol se casó y Chaac engañó a su hermano con la esposa del Sol. Por esa traición fue castigado y lloró por su gran arrepentimiento al haber hecho eso a su hermano. Su llanto y sus lágrimas son la lluvia.
¿Como hacían homenaje a la deidad de la lluvia Maya?
Los rituales que se le hacían al dios Maya Chaac eran para hacerle saber el inmenso agradecimiento que le tenían por haberles brindado abundante lluvia para beber y para regar los cultivos. Por este motivo ofrecían un tipo de comida ceremonial y hacían que cuatro niños bailaron para alegrar al dios.
También era común lanzar a un joven que podía ser una mujer o un hombre, a un cenote. En algunas ocasiones el joven resultaba ahogado, pero en otras ocasiones lograba salvarse.
¿Como esta representado el dios Chaac?
Físicamente Chaac se caracteriza por tener una nariz larga y dos colmillos que salen de la boca hacia abajo. En la cabeza trae una cinta amarrada. En la mano trae un hacha con la cual le pega a las nubes para hacer caer lluvia y truenos. Además de un hacha, el dios está representado en el periodo clásico con un escudo y armado.
En la mayoría de las representaciones, el dios Chaac está representado en un cuerpo humano, pero con escamas de reptil.
El jeroglífico de su nombre es un ojo que se transforma en una T en el Códice Tro-Cortesiano. Su jeroglífico representa una lagrima que sale del ojo que le da fortaleza aún más en su papel como dios de la lluvia. El mismo jeroglífico se usa para representar el día Ik ayudándonos a entender que el dios Chaac era el patrón de ese día.
El Dios único con Pluralidad
En la cultura antigua maya, Chaac era un dios, pero a la vez era muchos dioses. Cada dios Chaac representaba uno de los cuatro puntos cardinales. Cada dios gobernaba su propia dirección cardinal y cada dirección cardinal tenía su color propio. Se les refería con el título de “La deidad de la lluvia del oeste”, por ejemplo.
En el periodo clásico era común que los reyes se referían a si mismos con los títulos parecidos. Por eso, “la deidad de la lluvia del este” describe el rey de Chichen Itzá de la época.
Además, los reyes querían imitar al dios Chaac por otra razón: El dios Chaac era un dios poderoso que también controlaba las tormentas eléctricas que se veían como un signo de su rabia. Los reyes de los mayas en tiempos de guerra, también querían enseñar a su enemigo su poderosa furia.
Se vestían del dios Chaac, y usaban mascaras para representarlo y provocar temor a sus contrarios.